Aunque hacer té es fácil, existe todo un arte en la forma de prepararlo, especialmente si queremos obtener sus beneficios herbáceos. Cuando preparas un té correctamente, obtienes una extracción completa y equilibrada, llena del poder vegetal de las plantas.
Aquí te mostramos un método simple y efectivo para preparar una buena taza de té.
1. En primer lugar, debes siempre revisar el reverso de la caja de té y revisar si es que existen sugerencias de preparación.
2. Cada té debe contar con un tiempo de infusión sugerido, ya que depende del tipo de planta y mezcla. Esto mejora el sabor del té y la eficacia de las hierbas.
3. Después, hierve agua y viértela en tu taza con la bolsita. Asegúrate de cubrir la taza y permite que las hierbas se infusionen. Con el paso de unos minutos, el agua actúa sobre las hierbas y al cubrirla, te aseguras de que los aceites escenciales no se escapen con el vapor. El agua misma experimenta cambios a medida que las hierbas se infunden en ella.
4. Dependiendo de qué compuestos se liberen primero, el agua puede volverse ligeramente ácida o básica, lo cual a su vez afecta en la liberación de otros compuestos presentes en las hierbas.
5. Por esta razón, nuestros tiempos de infusionado recomendados varían de 5 a 15 minutos.
6. Aprovecha el tiempo de espera para estirarte, meditar o conectar con las necesidades de tu cuerpo. Recuerda que el ritual para preparar té es una oportunidad para tomarte un descanso y conectar contigo de manera consciente.
7. Una vez que tu té haya terminado de infusionarse, exprime la bolsita de té , con unas pinzas o cucharas, cuida no hacerlo con las manos, te puedes quemar. Esta práctica hace que aproveches al máximo los beneficios de las plantas y su sabor.
¡Disfruta tu tacita de té!